El imparable incremento del parque de automóviles eléctricos y su enorme acogida por unos usuarios cada vez más concienciadas por el respeto al medio ambiente, han traído a nuestra sociedad nuevas necesidades, hace pocos años desconocidas.
Difícilmente nuestros padres pudieran ni siquiera imaginar, que dependeríamos de un “enchufe” o cargador de coche eléctrico, para acometer nuestros desplazamientos del día a día, con coches electrificados y con cierto nivel de conducción autónoma.
Sin lugar a dudas la movilidad eléctrica ha llegado para quedarse, ahora tenemos que aprender a integrarnos con ella.
Uno de los grandes desconocidos son los sistemas de recarga para coches eléctricos y en especial los cables específicos para la recarga de coches eléctricos.
Aquí te vamos a mostrar como en ningún otro sitio, todo lo que necesitas saber sobre los cables de recarga, sus sistemas de seguridad, su morfología, su uso, mantenimiento, normativa…..para disponer siempre de una recarga segura tanto de tu vehículo como de si mismo.
Estos elementos hasta la fecha, eran un elemento discreto, poco conocido y de difícil acceso al público en general. Nadie había utilizado este tipo de cables hasta que se enfrenta por primera vez a la recarga de un coche eléctrico, ya sea en propiedad, en alquiler, renting….o simplemente de un familiar o amigo.
No es para nada un elemento complejo, raro, extraño, ni peligroso, si bien, hay que saber que existen muchos cables de recarga para vehículos eléctricos, de diferentes tipos, características, marcas, precios y calidades.
Pero su simpleza y facilidad de uso, ¡no debe llevarnos a equívocos!. Un cable para recargar un coche eléctrico no es lo mismo que un cable para la recarga de un móvil, una tablet, un PC o cualquier otro dispositivo electrónico. Como veremos en estas líneas, los cables de recarga son el nexo de unión entre el punto de recarga (wallbox o electrolinera) y el propio coche eléctrico.
Por estos dispositivos circulan intensidades de corriente eléctrica considerables que van desde decenas a centenas de amperios, más que suficientes para dañar seriamente a una persona. Además la velocidad de recarga también tiene que ver con el tipo de cable elegido y su sección de conductor activo (fases) por donde circula la corriente.
Por si fuera poco, estos cables también actúan como interfaz de comunicación entre coche y cargador, proporcionando información unidireccional o bidireccional entre ambos. Ya vemos que no es un simple cable como el de una alargadera de casa, así que vamos a aprender más sobre él.
Cargadores de coche eléctrico: ¿Con o sin cable?
En la mayoría de las ocasiones, cuando se trata de carga lenta o semirápida (hasta 22 kW de potencia) los cargadores no disponen de cable para recargar nuestro vehículo. Especialmente cuando los cargadores están en la vía pública, los cables no están anexos al cargador, por lo que es fundamental que llevemos uno de estos cables en nuestro maletero.
- Cable de carga para coche eléctrico, 32 A 22 KW, cable de carga rápida, Tipo 2
- Para una rápida, segura cargar su vehículo eléctrico
- De 3 fases, 5 GX6 mm² + 1 x 0,5 mm² (CP), hasta 32 A
- CE y RoHS, CP interconectados,
- Con certificación TÜV, ergonómico ladekupp Lung & enchufe cargador tipo 2 (bals)
La razón de que la inmensa mayoría de los cargadores no disponga de cable es simple. Los cable en están sujetos a hurtos, daños y vandalismo, por lo que requieren de mucho mantenimiento, reparaciones constantes e incluso sustituciones periódicas. Si cada usuario lleva su cable el propietario del punto de recarga no está sujeto a gastos imprevistos sobre el mismo.
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Cables de recarga coche eléctrico
Otra cosa muy diferente sucede cuando hablamos de carga rápida o superrápida (43 kW o superior). En esta situación, el cargador SI que debe de disponer de los cables en el propio sistema de recarga. Para estas potencias de recarga, los cables pasan a ser elementos complejos, delicados y pesados, por lo que ningún usuario podría llevar este tipo de cable en su vehículo.
Tipos de cables para coches eléctricos (BEV)
Ya hemos llegado a la conclusión de que el cable de recarga para coches eléctricos es un elemento esencial para acometer nuestros desplazamientos sin temor a quedarnos sin batería. Pero antes de llenar nuestro maletero de todo tipo de cables, adaptadores y objetos varios, hay que conocer las características fundamentales de este producto. Los cables de recarga para coches eléctricos son muy variados y de múltiples calidades, características y precios.
Así para elegir el mejor cable de carga debemos conocer:
- Conector: habitualmente necesitaremos un cable tipo 2 (también conocido como Mennekes ó IEC 61851) ya que es el conector concurrente con la mayoría de los vehículos eléctricos actuales del mercado europeo, si bien, pudiera existir aun vehículos (especialmente asiáticos) con el conector tipo 1 (Yazaki ó SAE J1772). Existen otros tipo de conectores como el CSS Combo (Combined Charging System) ó el denominado CHAdeMo, presente en la mayoría de las marcas asiáticas como Nissan, Toyota, Mitsubishi…, pero como ya hemos indicado anteriormente, estos cables están incorporados al propio cargador y son especialmente complejos. Se utilizan en las denominadas electrolineras con recarga en MODO 4.
- Capacidad de carga: debemos cerciorarnos de que el cable admite la potencia máxima a la que prevemos recargar nuestro coche eléctrico. Si no tenemos claro en qué condiciones vamos a recargar, aconsejamos adquirir el cable del mayor amperaje comercial. Actualmente los cables para recarga trifásicos de 32A son los de mayor capacidad que podemos adquirir para llevar en nuestro maletero. Merece la pena invertir para asegurarnos tiempos de recarga más rápidos y mayor versatilidad en cualquier situación.
- Nº de Fases: es muy distinto cargar en monofásico o en trifásico. A modo de ejemplo, recargando en monofásico a 32 A podemos alcanzar unos 7,2 kWh, mientras que haciéndolo en trifásico llegaríamos hasta los 22 kWh con la misma intensidad de corriente (32 A). Si nos decidimos por un cable trifásico no nos equivocaremos nunca, pues un cable para la recarga de coche eléctrico trifásico sirve también para carga monofásica.
- Sección del cable: va directamente relacionado con la capacidad de carga. A más sección más potencia soportará el mismo.
- Longitud del cable: a más longitud mejor. Es así de sencillo, pues no siempre tenemos el cargador cerca del puerto de carga de nuestro vehículo eléctrico. El estándar de 5 metros es suficiente en la mayoría de las ocasiones, pero podemos encontrar en el mercado cables de 10 metros o más longitud.
- Material: el cable de recarga debe ser de cobre, preferiblemente ignífugo, resistente a impactos y flexible, especialmente diseñado para ser enrollado y desenrollado asíduamente. Confiar en marcas registradas, con suficiente prestigio y autorizadas para la venta en Comunidad Económica Europea (con marcado CE del producto), es siempre una garantía. Si además tiene un buen precio, la elección será ideal.
Cables para híbridos enchufables (PHEV).
No nos podemos olvidar de los vehículos híbridos enchufables o PHEV (plug-in hybrid electric vehicle). En el actual proceso de transición hace una movilidad 100% eléctrica, los vehículos hídricos enchufables van a jugar un papel crucial. Este tipo de vehículo va a estar presente en nuestras carreteras y por lo tanto va a requerir de la posibilidad de recarga al igual que los vehículos puramente eléctricos. De hecho, las baterías de estos automóviles son cada vez mayores, por lo que requieren de mayor potencia de recarga y en consecuencia de mejores cables para su recarga.
La idea inicial de utilizar cualquier toma Schuko (enchufe estándar de casa) para recargar nuestro coche hibrido con un cargador portable, cada vez es menos viable, debido a la poca potencia de estos dispositivos (2,2 – 3,6 kW) y a los tiempos tan prolongados que se requieren para llevar a cabo recargas completas. Así, estos vehículos hay que tratarlos exactamente igual que cualquier otro coche eléctrico, desde el punto de vista de la demanda de potencia, la interoperabilidad con el punto de recarga y a la seguridad en el proceso.
Identificación de cables para recargar y conectores de vehículo eléctrico.
La estructura de un cable de recarga es sencilla.
- Nos encontraremos un tramo de conductor eléctrico, normalmente de cobre y con varios conductores en su interior. Un conductor trifásico para 32A dispone de 5 cables de 6 mm2 de sección (3 fases + neutro + tierra) para alimentar, proteger y dar potencia al coche eléctrico. Si el cable es monofásico, solamente dispondrá de 3 cables activos (1 fase + neutro + tierra).
Estos cables especialmente diseñados para recarga de coches, también debe de disponer de 2 cables de pequeña sección (normalmente 0,5 mm2) que se encargan de verificar la presencia de vehículo (Proximity) y de ofrecer comunicación entre cargador y coche (Control Pilot).
Este conductor debiera ser ignífugo, resistente y agradable al tacto, ya que vamos a interactuar con él cada vez que procedamos a la recarga. A lo largo de la longitud del conductor debemos encontrar las marcas que indican el tipo de producto de que se trata. Además del nº de conductores, de su sección y de la marca del fabricante, aparecerá un conjunto de números y letras que identifican las propiedades físico-químicas de sus componentes y cubierta (por ejemplo H07BZ5-F)
- Por otro lado nos encontraremos el conector propiamente dicho. Estos conectores también tiene su importancia y son vitales para la recarga del vehículo. Las marcas, modelos, colores, materiales, etc… son tan variados como fabricantes en el mercado. Evidentemente las dimensiones del conector debe ser acorde al tipo de conector (Tipo 2, SAE….), pero hay que tener un par de aspectos muy presentes a la hora de adquirir este producto. Primero debemos elegir un conector robusto, estanco y con un buen sellado. En segundo lugar, debemos de optar por conectores de plásticos “elásticos”, preferiblemente TPU (Thermoplastic Polyurethane) y a poder ser, sin tornillos.
Este tipo de conector resiste muy bien las caídas y aplastamientos, tan habituales en los procesos de recarga.
Los tornillos en los conectores para cables de recarga, tienen el problema de estar cerca de las partes activas interiores (cables internos) y suelen utilizarse en productos de media – baja calidad con plásticos rígidos susceptibles a romperse en caso de caída.
- Cable de carga de procesamiento de precisión diseñado con los mejores materiales (muy duradero y flexible). Superficie plateada de los contactos de potencia y señales.
- Manejo confortable mediante una empuñadura ergonómica y componentes de agarre adicionales de goma
- Potencia de carga máxima 26,6 kW. Carga trifásica - 480 V AC - 32A.
- Adecuado para Audi e-tron, BMW i3, Mercedes PHEV, Tesla S, X, 3, Renaul Zoe, Volvo PHEV, VW e-Golf y más (lista completa a continuación). compatible con 16A 32A carga pública y puntos de carga particulares (garaje).
- Probados según normativa LV124, LV214, LV215-2. Certificaciones IATF 16949:2016 e ISO 9001:2015.
La temperatura de funcionamiento y el número de inserciones garantizadas por los fabricantes, también son aspectos importantes, si bien, todos los fabricantes suelen ofrecer valores muy similares.
En cualquier caso, y por la tranquilidad de los usuarios, debemos indicar que todos los conectores puestos legalmente en el mercado, han sido probados, revisados y ensayados bajo estrictas normas internacionales que garantizan su correcto funcionamiento, independientemente del país de origen.
Comunicación coche eléctrico – cargador.
Otro aspecto poco conocido entre los usuarios de coches eléctricos, es el hecho de que el cable posibilita disponer de comunicación entre el cargador y el propio vehículo eléctrico. Si no paramos a pensar por un momento, en la enorme diversidad de cargadores que existen en el mercado y sus diferentes potencias de recarga, concebiremos que entre el coche eléctrico y el cargador debe “entenderse”.
- -Práctico: la longitud efectiva de trabajo de este cable de carga es de aproximadamente 3,5 m. El cable enrollado evita en gran medida el roce, el pisoteo y el enredo.
- -Certificado por TÜV Rheinland y provisto de CE. Los conectores y los cables están dimensionados para más de 50,000 ciclos de carga. El cable ideal para el hogar y el viaje. Adecuado para todas las cajas de pared comunes y para todas las estaciones de carga públicas y privadas
- -El mejor cable: el material del cable es TPU, el mejor material de cable del mercado. Muchos zapatos geniales también usan este material como suela porque es resistente al desgaste, suave y lo suficientemente fuerte como para soportar una cierta fuerza. También utilizamos nuestra tecnología única con una superficie mate, lo que la hace mucho más duradera.
- -Compatibilidad universal: compatible con casi todos los vehículos eléctricos estándar tipo 2 disponibles en el mercado de acuerdo con IEC 62196-2.
- -Garantía 1 año: utilizamos un material interno y externo de alta calidad para extender la vida útil de nuestros productos. El cargador ofrece una garantía de 1 año a partir de la fecha de compra. Si tiene alguna pregunta, no dude en contactarnos por correo electrónico: luaolz@163.com
A dia de hoy, podemos conectar nuestro flamante coche eléctrico en un enchufe Schuko (el que tenemos en casa) o en un Wallbox (cargador que normalmente se instala en nuestro garaje, en un hotel o en un restaurante….) o incluso en un cargador de alta potencia (electrolinera) de 100 kW o más, sin tener que modificar ningún parámetro de nuestro vehículo. ¿Cómo sucede esto?
Pues básicamente nuestro coche es capaz de leer una señal que manda el cargador por el denominado “Control Pilot” y este es capaz de leer esta señal y adaptar su potencia de recarga a la máxima de ajuste del cargador.
Así conseguimos recargar nuestro coche eléctrico en cualquier cargador de manera fácil y segura. Una vez más se demuestra la importancia de este tipo de elementos de interconexión entre coche y cargador “LOS CABLES PARA RECARGA DE COCHES ELECTRICOS”.
Normativa, calidad y seguridad de los cables de recarga para vehículos eléctricos
De manera resumida y sin entrar en demasiados tecnicismos, procedemos a indicar las dos normas que debe cumplir un cable para recarga de coche eléctrico.
Por un lado tenemos la norma del conductor propiamente dicho. Este componente debe cumplir con la EN 50620:2017 ó UNE EN 50620:2017 para España, redactada por el comité técnico CTN 211 Cables de Energía, cuya secretaría desempeña FACEL (Asociación Española de Fabricantes de Cables y Conductores Eléctricos y de Fibra Óptica). Esta norma específica el diseño, dimensiones y requisitos de ensayos de cable libres de halógenos con aislamiento flexible 450 /750 v. para suministro de electricidad entre el punto de recarga y el Vehículo Eléctrico. Esta norma es de reciente creación y de aplicación voluntaria en España, ya que el RD 842/2002 no la recoge como norma obligatoria. Aun así los cables de buena calidad del mercado internacional, cumplen con los requisitos recogidos en la misma.
Por otro lado tenemos la norma IEC 62196:2015 relativa a bases, clavijas, conectores de vehículo y entradas de vehículo. Aquí se regulan las características, dimensiones, pruebas…etc que se deben de realizar a estos accesorios tan necesarios para la recarga.
Comprar cables de recarga de VE
Para la compra del mejor cable de recarga de coche eléctrico, la receta es bastante sencilla:
- Buscar una tienda especializada y de confianza. El mercado está lleno de tiendas de venta de cables on-line y de tiendas físicas que desconocen el producto que vende. Como veis en estas líneas, no todos los cables son iguales, al igual que no todas las tiendas son igual. Recomendamos visitar tiendas exclusivas de venta de productos de movilidad. Ahí os podrán ayudar y asesorar sobre que cable de recarga comprar para no quedarte nunca tirado en tu coche eléctrico. (visita evhome.es).
- Buscar el mejor precio. Obviamente el precio importa, pero no debemos escatimar en este tipo de productos, por el bien de tu coche y por el de las personas que vais a realizar las recargas de coche eléctricos.
- Adquirir solo productos certificados. Nunca debemos recurrir a cable de origen desconocido y sobre todo no hacer “inventos” innecesarios para recarga nuestro coche.
Evitar los cables «caseros” montados sin garantías y con componentes independientes, sin el respaldo de un fabricante. Buscar sólo productos con certificados CE.
Uso, manejo y mantenimiento de cables de carga. ¡Precauciones!
La rotura de conectores es muy habitual en este tipo de productos. Las caídas de los cables eléctricos al suelo antes o después del proceso de recarga es muy habitual. Los cables de TPU (Thermoplastic Polyurethane) son ideales para soportar mejor los impactos. Los conoceréis porque normalmente se venden sin tornillos en sus laterales. Gracias al proceso de fabricación de termosellado se consiguen productos estancos, seguros y compactos. Además su estética y tacto suelen ser más agradables.
Tanto en formato estándar como en formato Scope (en espiral) los cables deben protegerse durante el transporte con bolsas de protección especialmente diseñadas para este fin. Evitaremos cortes, rozaduras y manchas de productos que pudieran ser agresivos para el cable.
Un cable de recarga para coche eléctrico no es susceptible de crear ningún tipo de peligro siempre que:
- Se mantenga su integridad. No debe presentar daños en la cubierta ni en el conector. En caso de presentar algún daño se debe someter a una prueba de aislamiento o se debe sustituir de manera inmediata. Si por alguna parte del cable se puede ver la parte activa (el cobre) debemos de desecharlo inmediatamente. ¡PUEDE SER PELIGROSO PROCEDER A RECARGAR!
- La instalación donde nos conectemos también debe ser segura y cumplir con las normas de seguridad legalmente establecidas. Tenemos la ITC BT 52 en la que se indica como se debe ejecutar una instalación de recarga de coches eléctricos en España y las protecciones que tiene que tener la misma.
Por último, respecto al mantenimiento de un cable de recarga, sólo debemos limpiar periódicamente el conductor así como los conectores y revisarlo periódicamente de manera visual. Realizar esos sencillos pasos con el cable siempre desconectado del cargador y del vehículo.
Adaptadores para cable de recarga de coche eléctrico
La casuística para poder cargar en cualquier sitio es tal, que en algún momento podemos necesitar de algún adaptador específico para coche eléctrico. Como ya hemos comentado, el conector tipo 2 ha ganado la batalla en Europa a la hora de marcar el estándar para recarga de vehículos eléctricos en corriente alterna. Pero cuando viajemos fuera de nuestras fronteras, o cuando accedemos a instalaciones que no son propias para la recarga de coches eléctricos, puede que necesitemos adaptadores para pasar de un modelo de conector a otro.
Aunque cada vez va a ser menos habitual, pueden existir aun, en lugares recónditos con socket tipo 1 (SAE J1772), sobre todo en cargadores de hace años. Estos cargadores pudieran estar anunciados en las distintas plataformas que los posicionan en las carreteras, y llegado el caso, puede que tengamos que utilizarlos como “punto de recarga en caso de aprieto”. Recordemos que el conector tipo 1 es monofásico y de potencia bastante menor que el tipo 2, pero cuando nuestra batería está en las últimas, bienvenido sea cualquier cargador sea del tipo que sea. Si además la energía que aporta es gratis, mejor que mejor.
Por todos estos motivos no viene mal tener a mano el adaptador necesario para llevar a cabo la recarga, sea cual sea el conector del punto de recarga. Lo más habitual que nos podemos encontrar es:
- Adaptadores trifásicos para recarga de vehículos eléctricos.
- Adaptadores monofásicos para recarga de vehículos eléctricos.
- Adaptadores Tipo 2 a Tipo 1 para recarga de vehículos eléctricos.
- Adaptadores Tipo 1 a Tipo 2 para recarga de vehículos eléctricos.
La oferta de estos productos es muy amplia en tiendas especializadas y en las distintas tiendas de internet. Recordemos que todos estos productos deben ser homologados y certificados por los fabricantes y/o empresas certificadoras. Esto nos dará una garantía frente a cualquier problema en el uso del producto o en caso de incidente en la recarga.
Al fin y al cabo nuestro coche eléctrico es un bien muy preciado y no merece la pena jugársela con inventos o chapuzas en los sistemas de recarga.